Desde hace ya algunos años las piscinas wellness vienen experimentando un auge considerable, tanto para ubicarlas en negocios como en domicilios particulares. Esta clase de espacios responde a las demandas de bienestar y vida saludable, tan valorados en estos días. Los techos de piscina contribuyen a configurar los espacios ideales para este tipo de centros. En Cuppola somos una empresa especializada en la construcción de cubiertas para piscinas, tanto de grandes dimensiones como de tamaño más pequeño.

Algunas características de esta clase de piscinas

El principal objetivo de las piscinas wellness es la consecución de un estado de bienestar mental y físico. Para obtener estos beneficios se suelen incorporar algunos accesorios y efectos que incrementan la sensación de relax por parte de los usuarios.

  • Chorros de agua. Estas corrientes que caen a modo de cascada suelen encontrarse en la inmensa mayoría de los centros spa. La incidencia del agua caída en estos chorros tiene varios efectos beneficiosos sobre el cuerpo. Si se aplican sobre la espalda y el pecho, repercuten en órganos internos como el corazón o el hígado. Cuando el agua cae directamente sobre la cabeza, ayuda a mitigar determinadas dolencias auditivas y oculares. En todos los casos, la caída del agua en chorros mitiga las tensiones musculares y estimulan la circulación de la sangre.
  • Hidromasajes. Los jacuzzis e hidromasajes son otras de las variantes de esta clase de piscinas diseñadas para la relajación y el bienestar. Este tipo de masajes consiste en insuflar chorros de agua que salen de distintos puntos de la piscina. Al salir estos flujos de agua se produce un burbujeo característico de este tipo de piscinas, los cuales producen unos efectos beneficiosos y relajantes sobre los usuarios. Estos flujos ayudan a aliviar las tensiones de los músculos y mitigar los dolores, en caso de que algún músculo tenga algún daño. A su vez, mejora la circulación de la sangre y mitiga el dolor de cabeza. También ofrece muy buenos resultados en casos de estrés y de insomnio. Por último, la piel también se ve claramente beneficiada con estos hidromasajes, puesto que ayudan a eliminar las toxinas de la piel y permiten la apertura de los poros. Actualmente existen piscinas de hidromasajes o spas hinchables, que se pueden ubicar fácilmente en jardines o fincas particulares.

Algunas ideas para conformar un espacio wellness

Además de la piscina en sí, para conformar un espacio totalmente confortable y donde cualquier persona pueda relajarse, es necesario tener una temperatura adecuada y determinados muebles que puedan favorecer la comodidad y el bienestar. La temperatura ideal se sitúa en torno a los 34º y los 36º para las piscinas climatizadas. En este caso, los techos de piscina desempeñan un papel fundamental, puesto que sin ellos no siempre sería posible alcanzar esta temperatura.

Es muy recomendable que cerca de las piscinas haya tumbonas, donde poder tumbarse y descansar plácidamente antes o después de tomar un baño. En los centros wellness suele haber solarium para conseguir un bronceado ideal aún en invierno. Actualmente hay aparatos de este tipo de menor tamaño, para que puedan ubicarse en domicilios particulares. Los solarium portátiles pueden estar destinados a broncear todo el cuerpo o solamente la cara.

El entorno de la piscina puede estar realizado en distintos materiales, pero los expertos suelen recomendar el revestimiento vítreo o el cerámico. Estos materiales ofrecen muchas ventajas especialmente desde el punto de vista higiénico, puesto que los azulejos son una superficie en la que los ácaros y los microbios que causan distintas alergias no tienen muchas opciones de sobrevivir.

Estos son algunos de los consejos para la ubicación de piscinas wellness, tanto en casas particulares como en negocios. Además, estos espacios van a ofrecer un valor añadido tanto a las casas como a alojamientos de hostelería.

ara que el agua de las piscinas se mantenga siempre limpia y en óptimas condiciones, es necesario que exista un sistema de filtración para mantenerla libre de suciedad como hojas, polvo o algas. Este citado sistema se compone de una depuradora (encargada de la filtración del agua) y una bomba de agua (responsable de mover el agua de la piscina para que pase por la depuradora). Para que los clientes conozcan exactamente el mecanismo, en este post explicaremos cómo funciona la depuradora de una piscina.

¿Cuál es el mecanismo de las depuradoras de piscina?

Tal y como hemos dicho anteriormente, las depuradoras se encargan de limpiar y purificar el agua. En Cupoola, como fabricantes de cubiertas de piscina, recomendamos llevar un mantenimiento adecuado para evitar la descomposición del agua con una depuradora de calidad, pero, además, instalar una cubierta para proteger el agua de evaporaciones, mantenerla libre de suciedad y ampliar la época de baño. Dicho esto, pasamos a describir el funcionamiento de estos sistemas necesarios en piscinas:

  • En primer lugar, la bomba se encarga de hacer girar una turbina a través de un motor eléctrico y de aspirar el agua de la piscina mediante el skimmer (situado en la superficie) y el sumidero (instalado en el fondo).
  • El agua se traslada por el interior del circuito. Pasa por la cámara de vacío de la bomba y sigue su recorrido hasta llegar al depósito de la depuradora. Esta contiene un material especial que se responsabiliza del tratamiento de filtración de las partículas de suciedad (arena de sílex o vidrio ecofiltrante) que contiene el agua en ese momento. Los modelos más avanzados incluyen, además, un filtro previo que retiene las partículas de gran tamaño como insectos, hojas o piedras. También colaboran en el filtrado de estos elementos la cesta del skimmer y el pre-filtro que presentan algunos modelos de bombas.
  • El lecho filtrante es el que recoge las impurezas del agua y las retiene, y la fuerza de la bomba es la que genera la fuerza suficiente para devolver el agua limpia a la piscina.

De esta forma, con un circuito cerrado, tendremos los elementos necesarios para mover el agua de forma constante y conseguir que, aunque llegue sucia a la depuradora, salga limpia hacia la piscina.

¿Cuánto dura un ciclo de filtración?

El ciclo de filtración se produce cuando ha pasado por dicho lecho toda la cantidad de agua que hay en una piscina. Para determinar la duración, deberemos tener en cuenta el tamaño de la piscina, la potencia de la bomba (cantidad de agua que esta es capaz de aspirar en una hora), y la de la depuradora en sí. Aproximadamente suelen durar 5 o 6 horas para conseguir las máximas prestaciones.

Tipos de depuradora

En las siguientes líneas explicaremos la diferencia entre los dos tipos principales de depuradoras:

  • Las de cartucho se caracterizan por presentar un funcionamiento muy simple y un mantenimiento sencillo y fácil, ya que solo será necesario sustituir el filtro cada cierto tiempo. Incluyen un filtro de celulosa o tejido que captura las impurezas. La capacidad para filtrar agua es más reducida que en las de tipo arena. Por ello, recomendamos su uso para piscinas pequeñas, sobre todo las que se desmontan.
  • Las de arena son ideales para piscinas grandes. Suelen incluir una válvula para seleccionar entre 6 posiciones diferentes, dependiendo de la función. Para elegir el modelo más adecuado, la mejor opción es contar siempre con la ayuda profesional que ofrecemos los especialistas.

En conclusión, nos gusta explicar como funciona la depuradora de una piscina para que los clientes sepan en todo momento para qué sirve cada mecanismo y la importancia de utilizar tanto este producto como cubiertas para mantener el agua de la piscina libre de suciedad.

Disfrutar de una piscina durante cualquier momento del año es cada vez más posible. En empresas como Cupoola ofrecemos cubiertas de piscina que mantienen el agua a una temperatura ideal y son sinónimo de seguridad para los niños. No podremos disfrutar de una piscina si no mantenemos el agua en un estado óptimo. Por eso, las soluciones rápidas para el agua verde de la piscina se explicarán en este post.

¿Por qué se pone verde el agua de una piscina?

El agua de la piscina se pone verde a causa de la aparición de algas por un desequilibrio entre el pH y la alcalinidad. Cuando estos no están por encima del límite recomendado, la piscina se convierte en un lugar perfecto para que las algas proliferen.

Entonces, ¿cómo lograr que no se generen algas? Para evitarlo, es importante encontrar soluciones efectivas, como la combinación de un sistema de filtración óptimo y el uso de tratamientos químicos. ¿Y qué podemos hacer cuando ya han aparecido las temidas algas?

Remover las algas

La primera solución que sugerimos para este problema es remover las algas de la piscina. Es importante limpiar la superficie del agua con una red y un limpiafondos, preferiblemente manual. Esto removerá las algas del suelo y de las paredes. Sugerimos que el limpiafondos también tenga un cepillo para lograr unos mejores resultados.

Es importante además conectar la manguera y hacer el vaciado del prefiltro para que las partículas no se acumulen ahí.

Tratamiento de choque

Lo primero que debemos hacer es verificar que el nivel del pH esté en los límites ideales, que son entre 7,2 y 7,6. Para ello, utilizaremos un test de cloro y pH. Cuando logremos el nivel de pH adecuado, realizaremos el tratamiento químico, que consiste en usar cloro de choque, ya que actúa rápidamente y elimina totalmente la suciedad.

El fabricante del cloro que elijamos definirá la dosis recomendada y la manera de diluirlo, aunque lo más común es utilizar un recipiente de unos 15 litros de agua, echar la dosis de cloro y verter la mezcla en el sistema de filtro, concretamente, en la boquilla de retorno. Para que el tratamiento funcione, el filtro debe estar encendido. Una vez finalizado, hay que comprobar el pH y reforzar el tratamiento.

Con este proceso, el agua pasará de ser verde a tener un color azul cristalino.

Usar alguicidas

Una solución interesante que podemos utilizar para combatir las algas es el alguicida. Lo aplicaremos con el fondo limpio y el agua ya desinfectada. El alguicida ayudará a eliminar la plaga de algas definitivamente. Una de las claves será obtener un antialgas efectivo, especialmente cuando tenemos un serio problema con estas plantas.

Para usar el alguicida, solamente será necesario verterlo en la piscina, aunque hay que calcular la dosis correcta de acuerdo a las dimensiones de la piscina. Si hay dudas, las indicaciones del envase serán de gran ayuda.

¿Y los floculantes?

Un paso más para dejar atrás el agua verde consiste en usar floculantes. Estos serán determinantes para recuperar el color y aspecto original del agua de la piscina. Se pueden utilizar sobre el agua o directamente en el skimmer.

Solamente hay que esperar después de usar el foculante y, después, pasar el limpiafondos. Esto será suficiente para lograr el resultado esperado.

En Cupoola creemos que las soluciones rápidas para el agua verde de la piscina son importantísimas para disfrutar del agua todo el año sin necesidad de preocuparnos. Esto, junto con una cubierta ideal para el tamaño, la posición y uso de la piscina serán los mejores amigos de la familia durante todo el año.

Con la llegada del calor y del verano, no hay nada más apetecible que darse un buen chapuzón en la piscina para refrescarse. Además es toda una diversión para los más pequeños de la casa. Pero en este espacio acuático también se producen muchos accidentes que se pueden evitar con algunas claves para mejorar la seguridad de los niños en la piscina.

Medidas preventivas

Algunas de las medidas más comunes son instalar vallas protectoras, iluminar la piscina, accionar alarmas de inmersión y de acceso a la piscina, tener mucho cuidado con los productos de limpieza utilizados en la piscina y cubrirla .

En el primer caso, instalar vallas protectoras es una muy buena opción para impedir el acceso a menores, pues no se podrán bañar sin la vigilancia de un adulto, que le les abra la valla. Además estos elementos metálicos resultan muy persuasivos con los menores, que entienden perfectamente que la zona está acotada y no se puede entrar en ella.

La segunda medida es iluminar la piscina, pues en el caso de bañarse por la noche si la piscina está mal iluminada, puede resultar muy peligroso, sobre todo para los más pequeños de la casa. Además con esta medida, se consigue realzar la piscina con un ambiente diferenciado dentro de la casa.

En tercer lugar, existen alarmas que se colocan en las piscinas y detectan si se produce movimiento en la superficie del agua, avisando si alguien se ha metido dentro o no. Estas alarmas se pueden instalar en los bordes de las piscinas o en la superficie, dejándolas flotar. Además se pueden colocar alarmas en las puertas de acceso al recinto, para alertar de la presencia de personas y así saber si se trata de algún niño que quiere entrar. Pues detectan el movimiento con sensores ubicados en distintas partes de la puerta.

En cuarto lugar, hay que tener mucho cuidado con los productos de limpieza que se utilizan, para el mantenimiento de la piscina, y guardarlos en un lugar seguro, al que no puedan acceder fácilmente los niños.

Cubiertas de piscinas

Por último, se puede cubrir la piscina cuando no se esté usando. Para ello existen cubiertas de piscina que evitan el acceso a la misma, además de preservar el buen mantenimiento de su agua. Pues evita que caigan al agua hojas, insectos y otro tipo de suciedad. Además en los momentos en los que la piscina no se usa, si se cubre, se pueden evitar sustos cuando los niños anden cerca de ella.

Las cubiertas de piscinas de Cupoola son ideales para satisfacer las necesidades en seguridad que requieren las familias con niños, además de aportar otros beneficios. Y es que dependiendo del modelo que se escoja, se puede conseguir que esta área recreativa se pueda utilizar durante todo el año, evitando la estacionalidad que suele suponer.

Las cubiertas altas, por ejemplo, cubren la piscina, al mismo tiempo que la cierran, evitando el acceso de los menores sin supervisión. De este modo se consigue preservar la calidad del agua, al mismo tiempo que se aumenta la seguridad.

Las cubiertas bajas o planas aseguran el cerramiento, pero no permiten utilizar la piscina durante cualquier época del año.

Mientras que los techos telescópicos para piscinas cierran la piscina, permitiendo su uso durante todas las estaciones. Además soportan carga como nieve o la fuerza del viento, por lo que se gana un extra de seguridad.

Son muchas las formas de garantizar las claves para mejorar la seguridad de los niños en la piscina. El bienestar de la familia durante el uso de la piscina y ayudar a que la diversión y el buen ambiente nunca acabe en tragedia para nadie.

Controlar el pH y el cloro de una piscina es fundamental para que el agua esté en las condiciones óptimas para el baño. Sin embargo, para lograr ese estado entra en juego otro elemento más desconocido, pero no menos importante: la alcalinidad. Por eso, desde Cupoola, como expertos en la instalación de cerramientos, techos y cubiertas de piscina, queremos que nuestros clientes también sepan cómo controlar la alcalinidad en el agua de la piscina.

El primer paso para conocer cómo controlar la alcalinidad en el agua de la piscina pasa por saber qué es y de qué depende. La alcalinidad es la capacidad que tiene el agua para neutralizar ácidos y se determina por la cantidad de carbonatos, bicarbonatos e hidróxidos, componentes alcalinos. Su importancia radica en que influye en la estabilidad del pH, es decir, con un valor adecuado de alcalinidad, entre 100 y 150 ppm, los líquidos pueden neutralizar adecuadamente los ácidos haciendo que el pH sea más estable.

No tener controlado este valor puede derivar en un agua turbia, poco apetecible para el baño además de producir irritación en los ojos, nariz o garganta, así como en la piel. Sin olvidar que puede producir manchas y corrosión en las áreas metálicas como en las escalerillas o generar un sobreesfuerzo en el sistema del filtrado.

Consejos sobre cómo controlar la alcalinidad en el agua de la piscina

El primer paso será conocer los niveles para analizar si el grado de alcalinidad es inferior o superior a los valores óptimos que se sitúan entre 100 y 150 ppm. Para medirlo se pueden emplear fotómetros o aparatos especialmente diseñados para este fin aunque lo más sencillo es usar tirar analíticas. Es la forma más rápida, simple y fácil de encontrar.

Cuando la alcalinidad total sea inferior a 100 ppm, será necesario aumentar su nivel mediante el uso de un producto especialmente diseñado para este fin. Nuestros clientes podrán encontrar en el mercado este producto de varias marcas. A la hora de incorporarlo al agua de la piscina, es fundamental tener en cuenta las indicaciones del fabricante.

En cambio, en caso de que el valor sea superior a 150 ppm, habrá que reducirlo empleando un producto especialmente diseñado para ello.

En cualquier caso, tener controlados los niveles de alcalinidad de la piscina permitirá que sus usuarios puedan disfrutar de chapuzón en una agua limpia, sin turbidez y sin sufrir irritaciones en la piel ni en las mucosas.

Además de tener controlados los diferentes parámetros como el pH o los niveles de cloro, recomendamos a nuestros clientes algunos consejos para que el agua de su piscina esté siempre en las mejores condiciones.

  • Medir con frecuencia los valores y actuar en consecuencia. El problema no se arregla solo, es necesario emplear productos que permitan obtener una calidad óptima para el baño.
  • Emplear productos de calidad y certificados, es garantía de que estos productos no producirán reacciones en la piel o mucosas.
  • Seguir las indicaciones del fabricante, atendiendo a la frecuencia de uso y cómo se debe emplear el producto de forma segura.

En Cupoola by Vegametal llevamos 50 años creando cerramientos y cubiertas para piscinas. De esta forma nuestros clientes pueden alargar la temporada de baños sin comprometer por ello la estética de su jardín o terraza, consiguiendo una mayor seguridad al evitar accidentes con niños y mascotas, sin olvidar el ahorro energético por el aumento de la temperatura del agua al formarse una especie de «efecto invernadero». Además con el objetivo de ofrecer asesoramiento, les informamos de cómo controlar la alcalinidad en el agua de la piscina para que puedan disfrutar plenamente de ella.

Hay que seguir diferentes pasos para preparar la piscina para el verano. Los meses previos al inicio de la estación son cruciales a la hora de disfrutar de los mejores baños. Revisar el estado de los componentes de la piscina es clave, al igual que actuar punto por punto. Además, disponer de cubiertas de piscinas es vital para mantenerla en el mejor estado, algo por lo que apostamos en Cupoola.

1. Preparaciones previas

Es importante empezar a preparar la piscina antes del verano. La razón es sencilla: las temperaturas no serán altas y se podrá trabajar con calma. El calor llega a resultar agobiante y no es recomendable realizar ninguna actividad bajo el sol. Hay que tener en cuenta que poner a punto una piscina requiere de varios días, diversas comprobaciones y acciones que necesitan un cierto esfuerzo.

En este primer paso, se recomienda revisar cualquier grieta o desperfecto en el perímetro de la piscina. Estos podrían contribuir a que el agua se escape y traerían todo tipo de problemas que es indispensable solucionar antes del verano.

2. Comprobar la depuradora

Del buen funcionamiento de la depuradora depende la calidad del agua. Si este elemento falla, las algas y microorganismos se desarrollarán sin freno. Los filtros y la bomba son las partes que primero hay que revisar, ya que cumplen un rol esencial durante el proceso de depuración. En caso de que se vean fallos o roturas, habrá que cambiar estos elementos en el menor tiempo posible.

También es importante retirar cualquier residuo alojado en el interior de la depuradora y limpiarla a fondo. Así se evita que, con el tiempo, la depuradora pierda eficacia o deje de funcionar en el peor momento.

3. Cambiar el agua y limpieza a fondo

Hay que cambiar el agua de las piscinas en las que esta se ha dejado de una temporada a otra. El líquido no se encontrará en buen estado para el baño aunque se haya protegido con una cubierta. Es importante asegurar el buen estado del agua y su calidad, ya que cualquier despiste podría haber dejado entrar la suciedad. Así, se disfrutará de un verano tranquilo.

Una vez vacía la piscina, se procederá a la limpieza tanto de las paredes como del fondo. Algunos restos se depositan en estos lugares y pueden llegar a fijarse con fuerza. Quizás sea necesario dedicar un par de días a este proceso, razón de peso para ejecutarlo antes de la llegada del calor.

Cuando la limpieza esté terminada, llegará el momento de reponer el agua o dejar la piscina vacía hasta la llegada del verano. En ambos casos, es posible colocar una cubierta para evitar que se llene de suciedad.

4. Preparar la seguridad con las cubiertas de piscinas

La seguridad es fundamental en una piscina. Si hay niños en la casa, revisar las barandillas y otros elementos no es una opción. El objetivo, como en el resto de los pasos, es comprobar el buen estado de los materiales y hacer los recambios que sean necesarios. Hay que prestar especial atención, ya que un fallo podría traer consecuencias de gravedad.

En caso de no disponer de los elementos de seguridad necesarios, conviene adquirirlos e instalarlos antes de la temporada estival. Solo entonces se podrá disfrutar de un baño tranquilo y seguro con toda la familia. Si la piscina está asegurada antes del verano, no habrá que actuar de forma precipitada y sin prestar atención a los detalles.

Estos son los pasos para preparar la piscina para el verano. Actuar con tiempo de antelación servirá para solucionar cualquier problema presente en poco tiempo. De esta forma, no habrá que trabajar bajo el sol y se garantizará desde la seguridad hasta la salubridad del agua.

No podemos realizar la construcción de una piscina a la ligera. Es importante que tengamos en cuenta diversos aspectos, como la cantidad de horas de uso que le daremos; quién o quiénes la utilizarán, sobre todo; o el clima del lugar. Incluso cómo orientar la ubicación de una piscina puede ser determinante y constituir un problema, si no lo hacemos correctamente.

Luego entrarán en juego otros aspectos secundarios, como la seguridad, la instalación de cubiertas de piscinas para mantenerla durante el invierno, etc.

En este post hablaremos, precisamente, de la orientación que debe tener la piscina cuando la construyamos.

Cómo lograr la mejor ubicación

La óptima ubicación de la piscina es imprescindible para sacarle el máximo rendimiento. Además, el mantenimiento se verá beneficiado por esta circunstancia.

Hay que considerar el sol

La piscina sirve para refrescarnos. Por ello, hay que tener en cuenta, en primer lugar, la localización del sol. El lugar más caliente de la zona donde se construirá será el aspecto clave. Y no se trata solo de tener este aspecto en cuenta, sino que debe ser el espacio donde más incida la luz solar.

Primeramente, debemos enfocarla en dirección sur;y, si no fuera posible, por la distribución de la casa, al oeste, para aprovechar mejor los rayos. También hay que considerar la vegetación y los árboles que haya. Aprovechar el sol en estas direcciones será vital para evitar las sombras indeseadas de los árboles. Finalmente, hay que observar y analizar bien el lugar, considerando esos factores.

Trampolines como problema

La diversión que puede dar un trampolín puede complicar una óptima ubicación de una piscina. La orientación de estos, dentro de ella, es también importante para no crear sombras ni cegarnos la vista por el reflejo del sol.

Distancia de la casa

Siempre se tiene esa duda cuando se está a punto de construir la piscina. En casas con poco espacio, en las que no hay más remedio que construirlas donde se pueda, este punto no es tan relevante; pero, cuando hay lugar suficiente, empieza el problema.

La piscina no debe estar cerca del porche, ya que puede salpicar a las personas que estén sentadas o, simplemente, al suelo, el cual no sabemos si está preparado o no para recibir el agua.

Además, el ruido es determinante. Si tenemos visitas en casa o estamos relajándonos en algún lugar de ella, el ruido que se hace en la piscina puede afectar a ambas.

Los accesos, siempre como prioridad

Los accesos a la casa deben ser prioridad, construyamos o no la piscina. La ubicación de esta no debe interponerse en una correcta circulación de las personas. Por ejemplo, si la piscina tapara accesos y, para llegar a la casa, hubiera que rodear la piscina, sería un problema. La regla es estorbar lo menos posible.

Las cubiertas pueden ser buenos elementos para contribuir a la orientación de las piscinas. Por ejemplo, las cubiertas planas permiten que se tape la superficie cuando no la utilizamos y, además, se aproveche el espacio (por si hay poco en la casa) al máximo.

Si en la casa hay niños o mascotas y existe preocupación por la seguridad, las cubiertas de Cupoola son perfectas parar lograr el objetivo que se espera y evitar cualquier tragedia.

Las cubiertas de piscina que poseemos en Cupoola son elementos perfectos para combinar el espacio con la seguridad total. Por eso, no habrá problema a la hora de decidir cómo orientar la ubicación de una piscina. En cualquiera de ellas, habrá una cubierta ideal. En Cupoola las hay de todo tipo: desde las altas a las bajas. pasando por las planas. Los diseños de nuestras cubiertas fusionan calidad, funcionalidad y modernidad.

gual que ocurre en otros terrenos, como por ejemplo la moda, también se dan tendencias en el diseño de piscinas que van variando cada cierto tiempo. Como es normal, el entorno en el que vayan a ubicarse estas piscinas va a determinar en gran parte el diseño que mejor se adapte, tanto al marco como a la propia piscina.

Para poder disfrutar del baño durante todo el año, las cubiertas de piscina son la opción idónea. En Cuppola ofrecemos una variedad de estas cubiertas que, además de conseguir la temperatura perfecta para bañarse, contribuyen a mejorar la estética de la piscina.

Aparte, hay que tener en cuenta el uso que se le dará a la piscina, y concertar si va a servir principalmente como lugar de relajación o si se va a nadar.

Si el uso principal va a ser la natación, el recinto deberá tener unas medidas específicas. En este caso, la forma que adaptará la piscina será necesariamente rectangular, y la profundidad que tenga será continua. Por el contrario, si el uso va a ir destinado al ocio, las piscinas pueden adoptar otras formas y presentar niveles de profundidad.

Tendencias en este 2021

Algunas de las tendencias en el diseño de piscinas que se van a poder ver en este año son las siguientes:

  • Con el suelo coloreado. Además del azul característico de los azulejos de las piscinas, pueden incluirse azulejos de otros colores que den como resultado combinaciones atractivas y alegres. Este diseño es muy recomendable en piscinas de hoteles o en piscinas públicas que sean utilizadas por niños. Para sacar el máximo rendimiento desde el punto de vista estético, es preferible que el entorno en el que se ubique la piscina no resalte demasiado para no restar protagonismo a la variedad cromática del fondo de la piscina.
  • Piscinas de cristal. Lo más llamativo de esta clase es que dan una sensación de profundidad y de espaciosidad. Preferentemente, estas piscinas estarán ubicadas en zonas altas en las que se pueda contemplar el paisaje del entorno.
  • Piscinas con iluminación. La colocación estratégica de focos de luz da un toque de originalidad a la piscina. Las luces ayudan a resaltar los colores del fondo y forman unos ambientes agradables, relajantes y acogedores.
  • Piscinas para espacios reducidos. En los últimos años, se están poniendo de moda este tipo de recintos de menor tamaño. Esta tendencia se ha reforzado en el último año debido a la situación sanitaria que hemos sufriendo. y está pensada más para familias o grupos de personas reducidos.
  • La decoración navideña se viene usando en el diseño de piscinas desde hace varios años y, previsiblemente, se seguirá utilizando durante los años venideros.
  • Para los contornos, las maderas o imitaciones con colores cálidos y neutros ofrecen una combinación perfecta con el entorno en el que se vaya a emplazar la piscina. Los suelos con láminas que imitan la madera, usando materiales naturales o artificiales, conceden a las piscinas un aire natural y a la vez moderno.

En cuanto a las cubiertas para piscinas, destacan las cubiertas telescópicas bajas montadas sobre tarima de madera. Este es un diseño moderno que permite un aprovechamiento considerable del espacio que circunda la piscina.

Cabe destacar también un modelo telescópico semialto, que ofrece una gran comodidad a la entrada de la piscina desde distintos accesos. Permite visionar el paisaje y da un aire moderno al conjunto.

Se pueden citar otros modelos de cubiertas, como por ejemplo la cubierta baja de tipo residencial. Esta clase es una de las más vendidas en el continente europeo, y se caracteriza por su polivalencia. Estas son algunas de las tendencias en el diseño de piscinas y de cubiertas que se verán este año.

Si nuestra piscina pierde agua, incluso después de haber reparado todas las fugas y reemplazado el cartucho del filtro, es porque esos factores no son la razón más común de este fenómeno. La principal razón por la que las piscinas pierden agua es la evaporación. Por ello, en los próximos apartados vamos a hablar sobre cómo reducir la evaporación del agua de la piscina.

Anticipamos que la solución más efectiva son las cubiertas de piscina. En Cupoola podemos ocuparnos de su instalación y mantenimiento aunque, por otro lado, hay otras actuaciones muy recomendables que también comentamos a continuación.

¿Cómo se puede evitar la evaporación en las piscinas?

¿Cómo podemos proteger nuestra piscina de la evaporación? Hay maneras de afrontar este problema con bastantes garantías, algunas de ellas compatibles entre sí. Aquí abordamos cinco, comenzando por la más efectiva: las cubiertas para piscina.

1. Cubiertas para piscinas

Los expertos en piscinas siempre recomendamos usar una cubierta para reducir la evaporación y maximizar los meses de uso de la piscina. Una cubierta de buena calidad puede ayudar a reducir más del 95 % de la evaporación que tiene lugar a lo largo del año.

Un beneficio adicional de esta solución es que también ayudará a reducir el consumo químico y energético de la piscina en más de un 50 % al reducir la evaporación química, los cambios de temperatura y la acumulación de escombros.

2. Productos químicos

Un método bastante moderno para prevenir la evaporación es el uso de químicos. Estos son productos a base de alcohol que debemos agregar al agua de nuestra piscina semanalmente. Crean una monocapa de agua en la superficie para cortar el efecto de la evaporación.

Estos productos no modifican el sabor ni el olor del agua de ninguna manera. Si bien estas mantas químicas son realmente innovadoras, no son tan efectivas como las cubiertas, y su aplicación implica agregar elementos adicionales a los habituales que pueden tener contraindicaciones alérgicas en ciertos casos.

3. Apagar las funciones adicionales de la piscina

Si la piscina tiene características como rociadores laminares, cascadas, fuentes o toboganes, aunque ofrecen mucha diversión y belleza a la piscina, también son responsables de aumentar la cantidad total de agua expuesta a la luz solar y al aire en la superficie. Una mayor exposición da como resultado una mayor evaporación. Así, una solución simple es desactivar estas funciones cuando no estén en uso.

4. Reducir la temperatura del agua

Otra forma eficaz y sencilla de reducir la evaporación es bajar la temperatura del agua de la piscina. Cuando el agua está caliente, las moléculas que contiene se mueven más rápido y se vaporizan más fácilmente en comparación con el agua más fría.

Si el agua está a una temperatura más baja, las moléculas se mueven lentamente y ayudan a reducir la evaporación. Además, si no usamos la piscina con regularidad, podemos mantener el calentador apagado, en caso de tener una piscina climatizada, y solo usarlo cuando vayamos a darnos un baño.

5. Cortavientos

El viento juega un papel importante en la aceleración de la evaporación del agua de nuestra piscina. Para evitar este problema, podemos instalar un cortavientos. Es un tipo de barrera que se sitúa alrededor de la piscina para reducir la velocidad del viento y minimizar su capacidad para golpear directamente la superficie del agua.

Ahora que hemos explicado cómo reducir la evaporación del agua de la piscina, queda claro que la solución más efectiva es usar cubiertas de piscina como las que instalamos desde Cupoola. Al margen de ofrecer protección contra la evaporación, contar con este recurso nos permitirá disfrutar de la piscina durante todo el año.

Cuando comparamos los cloradores salinos con los de cloro tradicional, podemos ver que los primeros ofrecen numerosas ventajas. Por ello, se han convertido en la mejor solución para desinfectar y mantener unas condiciones óptimas en las piscinas públicas y privadas. Y en el blog de cubiertas de piscinas de Cupoola te explicamos cuáles son sus beneficios. ¡Sigue leyendo!

Ventajas del uso de los cloradores salinos y las cubiertas de piscinas

El clorador salino ofrece una doble desinfección. El agua salada impide que se formen bacterias y algas, lo que es una ventaja para la piel de los bañistas.Además, evita el enrojecimiento de los ojos, que sí ocurre con el cloro normal. La electrólisis salina no daña el cabello ni tampoco los trajes de baño.

El tratamiento con un clorador salino ofrece una acción de desinfección doble. Por una parte, genera hipoclorito sódico en descomposición y, por otra, elimina los contaminantes en el electrodo.

– Ofrece una mayor seguridad. Elude los peligros de manipular determinados productos químicos, ya que no trabaja con ellos, excepto en la aguas duras. En este caso, se utilizan minoradores del pH. El único elemento utilizado es la sal y esta no requiere almacenamiento; de esta manera, se evita el riesgo de incendio.

– Sostenibilidad. El proceso de la electrólisis se basa en el uso de dos elementos totalmente naturales: el agua y la sal. Ambas no contaminan y generan una energía limpia. Por otro lado, son reciclables; así pues, el clorador salino es una solución respetuosa con el medioambiente.

– Ahorro. Otra ventaja muy importante de este sistema es el ahorro económico que supone. La cloración salina supone un ahorro del 80 % en mantenimiento y un 100 % en productos químicos, puesto que no los requiere para su funcionamiento. Por otra parte, permite mantener siempre la misma agua en la piscina, sin necesidad de cambiarla. En cuanto a su consumo eléctrico, constituye el equivalente al de una bombilla de bajo consumo.

– Comodidad. Su tecnología está adaptada para que, al aprovechar la energía de la depuradora, genere automáticamente la desinfección necesaria para cada piscina. Se trata de un sistema automático que solo requiere controlar el pH del agua, que debe estar entre un 7 y 7,6.

– Color del agua. Es fácil descubrir a simple vista si una piscina está tratada con un clorador salino. El color que presenta el agua es muy diferente, pues tiene una claridad y nitidez que no ofrecen las aguas tratadas con productos químicos. Este efecto se produce porque, al pasar las partículas que enturbian el agua por el electrodo, este las agrupa y permite una filtración de mayor calidad.

Bañarse todo el año es posible usando cubiertas de piscinas

Además de las ventajas que ofrece un clorador salino, también se deben tener en cuenta los beneficios que ofrece el uso delas cubiertas de piscinas. Estas evitan que caigan hojas o insectos dentro del agua. Cuanta menos suciedad caiga en el agua de la piscina, menos se ensuciará y, además, contribuirá a disminuir la carga de los filtros y bombas necesarios para la limpieza.

Un cubierta también contribuirá a evitar la evaporación del agua, por lo que no se deberá estar tan pendiente de ella. En definitiva, las cubiertas de piscinas ayudan a reducir la carga de trabajo que requiere el mantenimiento de una piscina. Además, ofrecen la posibilidad de bañarse durante más días al año, ya que no aumentará la temperatura del agua.

Y estos son los beneficios de los cloradores salinos para tu piscina. ¿Los tienes claros? ¡Deja un comentario si tienes alguna duda!